Aprendizaje activo.
Desarrollar el método activo en nuestros niños es esencial para fomentar un aprendizaje significativo y duradero. Este enfoque pedagógico, centrado en la participación activa de los estudiantes, les permite convertirse en protagonistas de su propio proceso educativo. A través de actividades dinámicas, experimentación y colaboración, los niños no solo adquieren conocimientos, sino que también desarrollan habilidades críticas como el pensamiento analítico, la resolución de problemas y la creatividad
Elizabeth Valencia Iglesias